lunes, 8 de febrero de 2010

Una bomba, y el vacío

La mitad de lo que soy se lo debo al insomnio. (La otra mitad se la debo al crédito bancario, que en total suma el doble de la mitad más el 345%.)

Mientras la gente duerme plácidamente, yo soy capaz de sacar mi parte artística (sí, sí, ya sé, bendito autoengaño). Así que me creo el cuento de que rimar silla con costilla o coleta con maleta puede resultar un poema subyugante. O escribo novelas absurdas que nunca verán la luz en una editorial o guiones de películas u obras de teatro. Y cuando entiendo (porque a veces lo entiendo) que mi carrera literaria es una más de mis múltiples chaquetas (mentales, de las otras no se habla por ahora), escribo notas de blogspot.

Pero hay días en que mis 2 neuronas aún vivas no conectan y entonces hay un vacío que dura hasta las 3 ó 4 de la mañana. Sin embargo, las exiguas bendiciones de este mundo capitalista posmoderno, me permiten entretenerme con la bazofia del televisor. Y no, ríanse, búrlense, hagan leña del árbol caído, NO TENGO CABLE.

Así que a esas horas las opciones son: cremas heladas para bajar de peso, una madre como columpio para hacer ejercicio y el ilustre rostro del Capitán Alborez, cuyo título es ya de dudosa procedencia.

Entre eso y el pánico de tener que decir por segunda vez que me sucede por primera vez, le di un sablazo a mi tarjeta de crédito de sólo 3899.90, con IVA incluido.

Succionar, ese es el secreto.

Primero se pone rojo, luego morado, después una mezcla entre azul y violeta, indescriptible. No, no es dolor. Es una sensación entre raro y literal "no mames".

Después de 56 minutos, por fin la cosa esa, que no me atrevo a llamar erección, empieza a disminuir y la tranquilidad regresa a la vida. En la soledad del cuarto, luego de tan vil experimento con uno mismo, vuelvo a reconocer la cara y voz del maldito capitán Alborez (cuyo título es, en definitiva, de dudosa procedencia) y descubro al lado mío la bomba que ha hecho el trabajo. Aunque el vacío, el vacío seguirá flotando en el aire sin necesidad de succión alguna.

4 comentarios:

  1. oie explikame algo por ke no entendi esta parte y descubro al lado mío la bomba que ha hecho el trabajo. Aunque el vacío, el vacío seguirá flotando en el aire sin necesidad de succión alguna.

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  2. Como siempre tus finales exquisitos, me mandas de la carcajada al vacío.

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  3. alo no se como publicar aca y no es que sea nuevo es que soy medio pendejo, me gusta tu blog y ahora ya deje los blogs existencialistas mamones para vivir en la clase media conforme al tuyo muyyy bueno brither te sueguire en el blog,atte. David Parra

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